A los muros de Amor vuelven los ojos; del jardín que
se intuye al otro lado proviene una melodía antigua
que ensancha la luz, hiere la carne y ... traspasa la
memoria.
A sus pies, a la amargura del dulce asedio, han acudido reyes, sabios, doncellas, cretinos, taimados, espíritus sin paz, asesinos, tahúres, borrachos y mercenarios. Algunos sólo conocen la gris melancolía de los paisajes del Norte y ... otros han dejado en el camino los últimos jirones del Mediodía. Hay peregrinos que borraron su nombre en las arenas derrotadas del desierto, algunos traen selvas en los labios ... hojarasca entre los dedos ... tatuajes de un tiempo sin horas en los brazos ... dorsos de alheña ... pupilas de ventisca.
Otros se rompieron la piel contra el salitre en el intento loco de gobernar locas naves sin globierno. Los náufragos ... los que se descuajaron junto a las cuadernas y los mástiles en mitad del acéano sin conciencia ... acarrean a los hombres el sueño quimérico de los libros y las playas, arrastran madera de deriva y ...cofres de nostalgia innumerable. Los culpables, irredentos cincelados en guerras nocturnas ... buscan la expiación que las calles les negaron. Las caravanas han detenido aquí su paso, han plantado sus tiendas frente a las fuentes siempre frescas. Las damas tejen el cuento sin principio, aguardan la señal ... hilan la ceremonia.
Suenan zanfoñas y vihuelas.
Leves pasos rozan la penunbra. Los actores y los tramoyistas se confunden con aquellos que ... sencillamente vinieron a observar. Se agita en un temblor febril el escenario, crujen como nieve virgen los tablones, el telón se desliza y ... rompe a hablar el verso.
A sus pies, a la amargura del dulce asedio, han acudido reyes, sabios, doncellas, cretinos, taimados, espíritus sin paz, asesinos, tahúres, borrachos y mercenarios. Algunos sólo conocen la gris melancolía de los paisajes del Norte y ... otros han dejado en el camino los últimos jirones del Mediodía. Hay peregrinos que borraron su nombre en las arenas derrotadas del desierto, algunos traen selvas en los labios ... hojarasca entre los dedos ... tatuajes de un tiempo sin horas en los brazos ... dorsos de alheña ... pupilas de ventisca.
Otros se rompieron la piel contra el salitre en el intento loco de gobernar locas naves sin globierno. Los náufragos ... los que se descuajaron junto a las cuadernas y los mástiles en mitad del acéano sin conciencia ... acarrean a los hombres el sueño quimérico de los libros y las playas, arrastran madera de deriva y ...cofres de nostalgia innumerable. Los culpables, irredentos cincelados en guerras nocturnas ... buscan la expiación que las calles les negaron. Las caravanas han detenido aquí su paso, han plantado sus tiendas frente a las fuentes siempre frescas. Las damas tejen el cuento sin principio, aguardan la señal ... hilan la ceremonia.
Suenan zanfoñas y vihuelas.
Leves pasos rozan la penunbra. Los actores y los tramoyistas se confunden con aquellos que ... sencillamente vinieron a observar. Se agita en un temblor febril el escenario, crujen como nieve virgen los tablones, el telón se desliza y ... rompe a hablar el verso.
Leer Muros de amor en El blog de María